Los tipos de refrigeración en los equipos informáticos son de distintos estilos dependiendo del caso y de la configuración elegida por cada uno de los usuarios. Uno de los tipos, que se distancia de la refrigeración tradicional a través del aire, es la refrigeración líquida, fundamentada en el uso de agua como medio transmisor para la expulsión del calor fuera del equipo. Este tipo de refrigeración, que se encarga de mantener en una buena temperatura todos los componentes del ordenador, se ha vuelto muy popular en los últimos tiempos, contando con importantes ventajas.

¿Qué es y cuál es su función?

Tal y como indicamos, la refrigeración líquida es la que se encarga de hacer que todo el calor producido dentro del ordenador, el cual podría ser muy perjudicial para el mismo, se expulse por medio de un proceso sencillo y eficiente. La refrigeración líquida no es algo nuevo precisamente, dado que se lleva utilizando en ordenadores desde hace 15 años.

Su efectividad se encuentra en que el agua es capaz de transmitir el calor de un lado a otro, 15 veces más rápido que el aire, proporcionando unos resultados mucho más efectivos en la práctica. Por otro lado, hay que tener en cuenta que la refrigeración líquida facilita la posibilidad de transmitir el calor que se ha tomado en la fuente hacia una zona de enfriamiento más acorde a las exigencias del equipo.

Esta zona secundaria permite la instalación de una serie de radiadores mucho más grandes y potentes, donde se termina el proceso de refrigeración de manera cómoda y segura. La idea es aportar flexibilidad sobre la habitual en los equipos para que la refrigeración no dependa en su totalidad de las aspas que se encuentren rozando el núcleo, con las que no siempre se obtienen resultados completos.

Imagen Bloque CPU WaterChill Antarctica 0149 Refrigeración Líquida

Tipos de Refrigeración líquida 

Si hablamos de tipos de refrigeración líquida dos encontramos con dos divisiones importantes a tener en cuenta: la pasiva y la activa. Este último modelo, el activo, depende de la utilización de ventiladores a la hora de llevar a cabo su cometido en cuanto a la expulsión del calor. El resultado con la refrigeración líquida activa es más eficiente que el de la pasiva, pero también tiende a unos niveles de ruido un poco superiores. Por su lado, la de tipo pasivo unifica varios de sus componentes principales en una misma pieza, lo que implica no depender del trabajo de los ventiladores.

De esta manera, tanto el radiador como la bomba se sitúan en el exterior y esto beneficia de una forma completa al rendimiento. La temperatura ambiente es lo que marca el ritmo de la refrigeración, con la que se alimenta el interior del equipo de forma continuada. Esto puede ser un inconveniente en algunos casos, dado que no hay ventiladores que enfríen de manera añadida. Al mismo tiempo, al no tener ninguno de estos ventiladores, se evitan los niveles de ruido, que pueden llegar a resultar molestos para el usuario.

Imagen Radiador Swiftech MCR80-F2 Refrigeración Líquida

Componentes

La refrigeración líquida depende de una serie de componentes fundamentales, como los bloques de agua, que están en contacto directo con la zona que se calienta, como la CPU. Hay bloques para cada pieza del equipo, desde los discos duros hasta las memorias. Los radiadores son la parte que se encarga de hacer enfriar el calor, y la bomba de agua se ocupa de ayudar a que el líquido esté en circulación. Los tubos, racores y enganches son elementos que también juegan un papel determinante en lo referente a enfriar la CPU y ayudar al ventilador.

Por otro lado, hay distintos tipos de bloque que se pueden tener en cuenta, como los de circuito integrado auxiliar, los de microprocesador, los de tarjeta gráfica y los de disco duro. Cada uno se encarga de intercambiar el calor con el componente determinado, produciendo un aumento de eficiencia en el equipo en base a la configuración elegida.

La pasta térmica también es útil, con el objetivo de aumentar la conducción y el depósito es fundamental, dado que guarda el líquido que se usaría de existir pérdidas. Además, la bomba, como indicábamos, es la que mueve el agua, y el radiador es lo que se ocupa de enfriar.

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